Ciudad de México, 28 de enero de 2025. En un paso histórico para la soberanía energética del país, la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo firmó un conjunto de leyes secundarias que revierten la reforma energética de 2013, fortaleciendo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) como empresas públicas del Estado y asegurando un modelo energético con mayor control público, transparencia y sustentabilidad.
Las leyes que serán enviadas al Congreso de la Unión incluyen:
✅ Ley de la Empresa Pública del Estado, Petróleos Mexicanos
✅ Ley de la Empresa Pública del Estado, Comisión Federal de Electricidad
✅ Ley de Planeación y Transición Energética
✅ Ley del Sector Eléctrico
✅ Ley del Sector Hidrocarburos
✅ Ley de la Comisión Nacional de Energía
Recuperación de la soberanía y justicia energética
Sheinbaum enfatizó que estas leyes sustituyen por completo las reformas aprobadas en 2013 durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, las cuales privatizaron gran parte del sector energético y limitaron la rectoría del Estado en materia de electricidad e hidrocarburos.
“Estamos dando viabilidad al país a futuro, al pueblo de México y garantizando la justicia energética. Ahora, CFE y Pemex son reconocidas nuevamente como empresas públicas de la nación, asegurando energía suficiente y a costos accesibles para el desarrollo del país”, destacó la mandataria.
La nueva legislación establece un esquema de inversión privada regulada y transparente, permitiendo una participación de hasta 46% en el sector eléctrico, sin los mecanismos de privatización que marcaron las reformas anteriores.
Plan de inversión histórica para la CFE
Sheinbaum anunció además un Plan de Inversión sin precedentes para fortalecer la generación, transmisión y distribución de electricidad en México, con un monto total de 23,400 millones de dólares, distribuidos de la siguiente manera:
🔹 12,300 mdd para la generación de 13,000 megawatts
🔹 7,500 mdd para la transmisión de energía
🔹 3,600 mdd para la distribución de electricidad
Este plan permitirá garantizar la estabilidad energética del país y la implementación del Plan México, impulsando el desarrollo industrial y la atracción de inversiones con un suministro eléctrico confiable y accesible.
Un cambio trascendental en la política energética
La Presidenta subrayó que estas reformas no solo revierten las modificaciones aprobadas en 2013, sino también aquellas implementadas desde 1992, consolidando un nuevo modelo energético que refuerza la independencia del sector y blinda a la CFE y Pemex de futuras privatizaciones.
«Estas reformas colocan a México en una nueva era energética, con reglas claras, inversiones estratégicas y un enfoque en la soberanía nacional. Hoy, el sector vuelve a estar al servicio del pueblo, no de intereses privados”, concluyó Sheinbaum.
Con esta decisión, el Gobierno de México reafirma su compromiso con una política energética que garantice electricidad y combustibles a precios justos, impulsando el desarrollo con una visión sustentable y socialmente responsable.
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