Air: La historia detrás del logo, es una película altamente disfrutable, que usa el factor nostalgia a su antojo.
Hace un par de semanas, se estreno en Amazon Prime Video, «Air; la historia detrás del logo». La cinta que narra los hechos ocurridos en la década de los 80´s en las oficinas de Nike, donde sus empresarios cruzaron los limites del arte la negociación, para poder firmar un acuerdo de patrocinio, con un tal Michael Jordan.
La estrella del baloncesto universitario de North Carolina, había dado mucho de que hablar entre las marcas deportivas más grandes de ese entonces (Converse y Adidas). Quienes estaban dispuestos a ofrecerle un atractivo salario, a cambio de vestir sus tenis en su paso por la NBA.
Jordan, quien usaba Adidas desde el Instituto, estaba cien por ciento convencido de que esa sería la marca con la que se comprometería. No solo porque era su favorita, sino, porque los más grandes basquetbolistas del momento también los usaban. Converse por su lado, aunque estaba seguro que tenía la batalla perdida, preparó una interesante oferta con el fin de competir con la marca de las tres líneas.
Entre esta batalla de oficinas por el jugador, un tercer contendiente con cero éxito en la línea de tenis de basquetbol, entró al quite por Michael; Nike.
La historia de los olvidados.
Liderados por el gurú y leyenda del baloncesto Sonny Vaccaro, el recién nacido departamento de basquetbol de Nike, trazó un plan de contratación por Jordan, que rebasó los limites económicos, pero sobre todo «respetuosos» del deporte por aquellas épocas.
Y como bien lo dice Vaccaro, interpretado magistralmente por un genial Matt Damon, todos aquellos involucrados en la firma de Jordan, y la creación de los míticos Jordan 1, fueron olvidados, cubiertos por la sombra del jugador que cambió el juego por dentro y por fuera.
Esta película no solo los recuerda y homenajea, además, es una «master class» de cine convencional. No se necesita de grandes y despampanantes efectos especiales, para conseguir un buen filme.
Es más, el guion tan sólido de la cinta, que sabe a donde va desde el principio y lo que quiere generar en el espectador (nostalgia), no necesita si quiera que Michael Jordan como tal, aparezca en pantalla. No es su historia, es de quienes le pusieron los «Air Jordan» en los pies.
Air: La historia detrás del logo, es un buen ejemplo de que el cine convencional, sigue vivo para quienes quieran hacerlo, y también verlo.
CON LA INFORMACIÓN DE ÁNGEL ZAPATA.